El peronismo y el desafío de volver a ser alternativa

«El peronismo hoy es la gran tradición política sobre la cual se monta una nueva etapa, y eso es una ventaja, ya que toda construcción de mayorías se monta sobre una tradición que la precede y a la cual le da nuevos aires», reflexionó el politólogo sobre los efectos que tuvo en el movimiento justicialista la condena y posterior inicio de cumplimiento de pena de Cristina Fernández.

Reynares consideró que tanto Sergio Massa, como Axel Kicillof, Juan Grabois y Guillermo Moreno están pensando en una propuesta conjunta del peronismo como un movimiento de desarrollo, crecimiento y de igualdad. Sin embargo, dijo que además, es importante incluir a los «peronismos provinciales», que suelen ser más conservadores que los porteños y bonaerenses.

Además, el politólogo aseguró que el silencio del ex gobernador Juan Schiaretti y el actual gobernador Martín Llaryora sobre la condena a Cristina, sería a causa de que no creen que corresponda que en un año electoral la Corte Suprema haya fallado con tanta celeridad contra la ex presidenta.

Con respecto a la situación de los peronismos provinciales, mencionó que «el PBI está muy mal distribuido, lo que provoca debilidad en los gobiernos provinciales, que deben negociar con el gobierno nacional». Por ese motivo, sostuvo que «el peronismo tiene mucho potencial para promover nuevamente una apuesta en la figura de Cristina, pero para eso hay que salir de las imposiciones que hay desde los medios, para lograr una construcción federal».

Al referirse a la situación del peronismo cordobés, Reynares analizó que Llaryora debe hacer equilibrio con la nación para obtener recursos, y por eso también hace silencio por la situación de la ex presidenta. Sin embargo, aseguró que el PJ cordobés debe, al mismo tiempo «diferenciarse del gobierno nacional y del peronismo nacional, ya que siempre tuvo esa posición».

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